SEXTON Un sacristain de choc !
Aunque no estuvo realmente a la vanguardia del progreso en armas blindadas durante la Segunda Guerra Mundial, el ejército británico no dejó de sacar conclusiones valiosas de sus primeras experiencias contra la Panzer-Divisionen. Uno de ellos, que está particularmente emergente en el norte de África, es el uso por parte de los alemanes de piezas de artillería autopropulsadas con orugas para acompañar a sus formaciones mecanizadas. Las máquinas autopropulsadas, como el sIG33 en un chasis Panzer II alargado o el cañón leFH18 en Lorraine, siguen siendo solo improvisaciones, que sin embargo revelan capacidades evolutivas prometedoras. Un concepto que interesa a las autoridades británicas.
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