Cruceros pesados británicos 1939-45 – NUEVA VANGUARDIA 190

La idea de un crucero pesado surgió después de la Primera Guerra Mundial, y estaba estrechamente vinculada a los límites establecidos por el Tratado Naval de Washington de entreguerras. El concepto anterior a la Primera Guerra Mundial de cruceros blindados había sido abandonado, pero en su lugar el Almirantazgo vio un lugar para cruceros poderosos, capaces de patrullar las rutas marítimas del Imperio Británico, y que estaban lo suficientemente bien armados como para poder destruir los cruceros comerciales enemigos. El resultado fue un grupo de buques de guerra británicos, conocidos como los "Cruceros del Tratado de Washington", que hicieron todo lo que el Almirantazgo quería, pero que se ajustaron a los límites impuestos por el tratado. Estos impresionantes cruceros eran de lado alto, espaciosos y majestuosos, perfectos embajadores en tiempos de paz para el poder británico. En la guerra también dieron un golpe considerable. Durante la Segunda Guerra Mundial, los trece cruceros pesados de la Royal Navy prestaron servicio en todos los teatros de la guerra, ya sea frente al Bismarck en el Atlántico Norte o soportando ataques kamikazes en el Pacífico.

Fuente: Publicación de Osprey